miércoles, 18 de abril de 2012

Miguel de Cervantes y La Galatea.



Yo ardo y no me abraso, vivo y muero;
estoy lejos y cerca de mí mismo;
espero en solo un punto y desespero;
súbome al cielo, bájome al abismo;
quiero lo que aborrezco, blando y fiero;
me ponen el amaros parasismo;
y, con estos contrarios, paso a paso;
cerca estoy ya del último traspaso.

Cervantes

Presencias Invisibles

martes, 17 de abril de 2012

La palabra Gnomo proviene de la griega gignosko, que significa aprender o comprender.



Los historiadores no se ponen de acuerdo en cuándo estos seres mágicos empezaron a ser mencionados por las gentes. Son más los que eligen Dinamarca como su cuna, aunque se entiende que fueron las culturas nórdicas y germánicas las que más los utilizaron. Pero hasta que Paracelso los mencionó en su libro Tratado de los elementales no parecieron adquirir carta de naturaleza.

Los gnomos del Moncayo de Adolfo Bécquer, son verdaderos diablos que generan voces, sonidos y hasta conversaciones para tentar a las personas más codiciosas, ésas que pretenden llegar a las galerias subterráneas donde viven los "enanos monstruosos" junto a los tesoros que han acumulado durante siglos. Tesoros que en su día ocultaron los avaros, los infieles y otros delincuentes.


Los gnomos pertenecen al grupo que los irlandeses llaman Buena Gente, donde se encuentran también los elfos. También pueden convertirse en seres humanos, en algunos casos para cometer el mal.
-Patricia C-

PRESENCIAS INVISIBLES