Aristófanes criticó con dureza la política de Cleón, un demócrata demagogo (Los Caballeros, la más virulenta de sus obras); criticó con energía la guerra; la paz será un tema obsesivo para él... Podemos decir que Aristófanes es un fantástico crítico de la política de su época, pero también de algunos temas universales; ahí radica su genialidad. La comedia siempre existió, existe y existirá, pues es una crítica a la circunstancia universal, ahora bien, bajo la crítica hay siempre una ideología, y la de Aristófanes fue conservadora, aunque de gran profundidad y no carente de amplitud de miras.
El blog de Marpin y la Rana.
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